¿Por qué una nueva ley?
La nueva ley de tabaco es una iniciativa de amplio consenso en el país que busca proteger la salud del conjunto de la población, en particular de quienes han elegido no fumar y de nuestros niños y adolescentes.
El consenso está dado porque en Chile, al año, una de cada cinco muertes está asociada al consumo de tabaco. Es un problema de salud pública de marca mayor, una batalla que no estamos ganando.
Las adolescentes chilenas son las que más fuman en el mundo, en tanto que los adolescentes ocupan el segundo lugar en nuestra región. Esto significa que un 39,9% de las jóvenes entre 13 y 15 años fuma, siendo la prevalencia más alta en el mundo, según el Atlas Mundial de Consumo de Tabaco 2012. Además, un 51,7% de los adolescentes de esta edad está expuesto al humo del cigarrillo, sin fumar.
Si no se logra revertir esta tendencia, que es actual, que habla que los jóvenes consumen asiduamente tabaco, se registrarán importantes efectos negativos en su calidad de vida, porque el tabaco no sólo provoca muertes, sino que hace que éstas sean lentas, invalidantes y onerosas. Chile gasta del orden de los US$ 2.500 millones anuales en atender las secuelas de salud de las personas que fuman.
En base a la realidad de Chile, la nueva ley aborda a lo menos 8 grandes temas: Que todo espacio cerrado, es por definición, libre de humo de tabaco, así como en los estadios o recintos deportivos; prohibición de la publicidad en los puntos de venta, restringir el uso de aditivos en la fabricación de los cigarrillos, mayor fiscalización y nuevas multas, nuevas advertencias de prevención en las cajetillas, y mayor educación.